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Cuando confiamos en la voz intuitiva del cuerpo, aparecen las sincronías más bellas que nos pueden pasar…   Método Cuerpo Profundo,  el arte de sentir, fluir y conectar. Soy Valesa rivera,  bienvenid@ a este espacio de exploración...  Habita tu cuerpo y transforma tu vida  a través del movimiento; Danza tus emociones,  despierta a la vida,  descubre nuevos caminos... SUSCRÍBETE a mi blog y recibe ejercicios, reflexiones, tutoriales, clases online :

Transforma tus bloqueos en una exploración creativa


Te sientes tieso, rígido o bloqueado?


Mi metodología cuerpo profundo busca transformar los bloqueos y obstáculos en un proceso liberador creativo; aprender a convertir los obstáculos en una experiencia de asombro, despertando el placer de descubrir; disfrutando del reencuentro contigo mismo y con el otro. 


En mis sesiones de práctica descubrirás herramientas y estrategias para desbloquear tu cuerpo y cómo recuperar la confianza de moverte y expresarte con libertad.



Claves para superar los bloqueos que surgen al bailar o en lo que deseamos hacer


Observo que el mayor obstáculo tanto para bailar como para seguir lo que deseamos vivir es la desconfianza que tenemos, sobre todo de nosotros mismos: el miedo a moverse, el miedo a equivocarse, el miedo a expresar, el miedo de acercarse al otro, el miedo a lo desconocido… 




Atreverse y empezar 


Empezar Implica atravesar el umbral de saltar a lo desconocido. Dejar de pensarlo tanto y no preocuparse por el resultado, abriendo la escucha y la confianza de seguir el movimiento intuitivo, donde todo lo que surja desde ahí, será una experiencia vital que seguirá abriendo caminos…




Suelta el miedo a equivocarte


En el miedo a equivocarse, nos quedamos paralizados en la indecisión sin seguir adelante. El camino no está trazado. Cómo dice una canción “se hace camino al andar”.

Y así al bailar como en lo que deseamos hacer,  si nos aventamos a caminar con el juego de improvisar, de probar y explorar, permitiendo lo que aparece, uno descubre que bailar no se trata de si está bien o mal, lo que aparece se transforma de cualquier modo, lo importante es en que lo transformamos, en aprensión o en aprender a escuchar con el cuerpo y en permitirse expresarlo para que el flujo encuentre su forma…




Expresa lo que sientes. 


A veces creemos que no tiene importancia lo que sentimos o lo que nos está llamando con tanta fuerza y simplemente lo dudamos y lo bloqueamos. Muchas veces por el miedo a hacer el ridículo. 



Expresando es el modo en que la emociones se mueven y se liberan. 



Permitirse ser abre la inimitable belleza 




Juega, buscando lo que encuentras 


En el juego, es necesario habitar tu niño interior; permitirte ser y explorar con libertad; hacer de tu práctica una exploración lúdica, no tomarlo serio si no con afecto y asombro como los niños… cuando aparezca algún miedo o bloqueo, interioriza esta frase y repítela: 




Confío en que todo lo que surja me

permitirá seguir 

descubriendo y abriendo caminos. 




Practica la Confianza con el arte de improvisar 

La práctica de la improvisación en el movimiento 

Los ejercicios de cuerpo profundo te permiten cultivar  El arte de improvisar recuperando la confianza y la capacidad de reinventarte, bailando con lo que está ocurriendo.


La exploración  que propone Cuerpo profundo es una práctica vital de la recuperación del asombro y la confianza de seguir lo que uno siente, en donde los miedos se transforman en una danza creativa e inspiradora, que nos prepara para danzar con lo inesperado y los cambios, haciendo de esto un modo de libertad y celebración.



Libérate de juicios y de ideas fijas


Hay muchos mitos cómo el decir tengo dos pies izquierdos, soy una piedra, o algún calificativo o etiqueta que uno puede tener de sí mismo que nos lleva a bloquear la posibilidad de que sea diferente. Si todo está en constante transformación, si la vida misma es la danza de la transformación, quedarnos con una idea fija, así cómo una postura fija, nos lleva a bloquear otras posibilidades y por consecuencia a chocar al resistirnos al cambio, lo fijo caduca, pero podemos ver el lado positivo de que caduque: puedes liberarte de la idea o juicio que tienes de ti y eso sería liberarte de un gran parte de los bloqueos que paralizan, si uno cree "soy una piedra" el cuerpo se vuelve tieso. Lo importante es ver que es mejor aprender a escuchar y moverse desde la escucha que desde la interpretación y los juicios que se desconectan de la realidad que está en constante cambio. Inclusive lo que en algún momento nos hace bien si no se va transformando se va en contra de nosotros. Creo que puede ayudarnos a fluir más si tenemos presente que lo único fijo es nuestro juicio e ideas... Lo demás se está transformando todo el tiempo y está esperando a que te integres a danzar con ello en lugar de rechazarlo. 



Danza con el otro

Expresar con el cuerpo nos lleva a recuperar la inspiración de vivir, nos regresa la fuerza vital que nos sana de muchas maneras y nos devuelve el impulso creativo para transformar nuestra vida.

La danza con el otro nos puede dar mucho en estos tiempos en donde estamos desconectados, individualizados, aislados. El compartir con el otro el contacto en un diálogo sin palabras permite un espacio para dejar de pensar y dejarse llevar para sentir, fluir, conectar; un espacio para permitirse ser


Danzar en conexión con el otro me ha rescatado en muchos momentos de crisis, en momentos difíciles en las que no encontraba salida. Conectar con el otro me regresa al afecto, me saca de mi inercia, me abre nuevos caminos y me da la inspiración de un nuevo impulso…




Respeta tu proceso 

Al practicar los ejercicios y conectar con tu cuerpo, permitiéndote sentir y tomando conciencia de tus movimientos, puede ser que te descubras con bloqueos que no te habías percatado antes, tal vez puedes notar más y sentirte tieso, inclusive más torpe que antes.  Esto es totalmente natural y no debe llevarte a la frustración, es un proceso que indica que estás observando y escuchando más y esto quiere decir que estás comenzando a liberar bloqueos aunque tu sientas lo contrario. El darte cuenta y tomar conciencia, a veces puede ser que no sea cómodo, ya que implica encontrarte con tus resistencias, con ciertos  miedos que se expresan en el cuerpo. Sin embargo este es un proceso muy valioso para un camino de auto descubrimiento y transformación porque en la medida en la que vas tomando conciencia de tus resistencias y en donde estás forzando o cargando demás, puedes liberarlo y sanarlo. 


Tómate tu tiempo, sin forzar 
explora tu propio ritmo 
con paciencia 




Bitácora 


Me gustaría compartirte un texto, de cuando comencé a escribir mis experiencias en la danza y dando clases: lo que dio inicio a mi método Cuerpo Profundo...

Es importante decir que me daba miedo escribir y más compartirlo:


24 de agosto 2001


Y aquí estoy… Y así comienzo a escribir… Saltando a lo desconocido. Me decidí a empezar por aquí porque es un modo de atreverme a empezar…

Hoy escribir me gustaría dedicarlo a perder el miedo a que lo que escriba no tenga sentido.

Hoy festejando mi cumpleaños… en una galleta china me salió: nunca dejes de expresar lo que sientes. 

Y sí… permitirse expresar lo que uno siente es un salto al abismo, un modo de atravesar los miedos y dejar de pensar si está bien o mal; dejar que aparezca lo inacabado, confiar en lo que es, así imperfecto, simple. Permitirme confiar que lo que aparece es y que después irá tomando su propia forma... Me gustaría ahora este texto así cómo está, darle "enter" y compartirlo... y dejar que su resonancia sea… Quiero escribir para no olvidar lo que sucede, cuando estoy abierta a sentir…  y compartirlo con las personas que han sido parte de esta exploración y con quienes aún ni si quiera puedo imaginar...



Cuando nos atrevemos a confiar en la voz intuitiva del cuerpo aparecen las cosas más vitales, diría las más inimaginables sincronías y experiencias que nos pueden pasar…  






Comentarios

  1. Hola Valesa!! Al leer el comienzo de tu reflexión, la parte donde mencionas lo de la desconfianza y el miedo de nosotros mismos, pensé en que tienes mucha razón. En mi caso, yo desde muy pequeño fui una persona a quien le costaba muchísimo conectar con el baile. Recuerdo que desde que tenía cinco o seis años me daba mucha vergüenza bailar. Sobre todo en los festivales escolares. Bueno, yo que estudié en escuelas públicas, recuerdo que en las fechas especiales como el día de la primavera, o el día de las madres, siempre las maestras nos ponían una coreografía para bailar una canción. Y recuerdo que desde siempre tuve mucha dificultad para coordinar mi cuerpo, para imitar los movimientos de otras personas, en fin, a pesar de ser un niño, yo me sentía un desastre al intentar bailar. Bueno, en este momento no describiré los pormenores del largo camino que ya como adulto he andado en mi afán de autoconocimiento corporal y emocional. Pero el punto al que quiero llegar es que hace unos pocos meses un grupo de amigas me invitaron a ir a un evento de la Nueva Red de Bailadores. No está de más decir que a lo largo de mi vida he tratado de alejarme del baile social, por las razones ya expuestas, y este tipo de eventos que menciono tienen una dinámica como de una fiesta en un antro, pero sin alcohol, y sin tener la obligación social de imitar el tipo de pasos o de baile que hacen la mayoría de las personas. El principio es el baile libre de cada persona. Y esto fue lo que me animó a ir: poder bailar según mis propias necesidades de movimiento. En ese evento me pude descubrir moviéndome sin ninguna vergüenza, o miedo a equivocarme en los pasos, o a no seguir el ritmo de las demás personas, o el miedo a ser juzgado por cómo me muevo. Ese día me sentí en total libertad de bailar, expuesto ante la mirada de muchas personas. Días después de esto, también reflexioné que para poder explorar, descubrir y asumir mi propio ritmo y mi propio baile, sin prejuicios ni juicios hacia mí mismo, de alguna manera hace falta tener una mirada sobre sí mismo sumamente amable y amorosa. Ser capaz de auto percibirme a través de la ternura para conmigo mismo. Siento que este podría ser un buen punto de partida para poder superar los miedos que mencionas que obstaculizan nuestro propio baile.

    Hay otros puntos que tocas que también me gustaría comentar, pero bueno, me parece que ya está muy largo mi comentario. Saludos y gracias por compartir esta reflexión.

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